jueves, 11 de mayo de 2017

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El día de las madres es un día para homenajear a las mamás y también para honrar a cualquier figura materna que esté en tu vida.

 ¿Cuál es el origen del día de las madres?
 Sus orígenes se remontan a muchos siglos atrás, cuando se homenajeaba la figura materna como símbolo de fertilidad y vida.
 La Grecia antigua
Los antiguos griegos rendían homenaje a Rea, madre de Zeus, Poseidón y Hades.
La Roma antigua
Los antiguos romanos rendían tributo a Cibeles, diosa de la madre tierra y simbolo de fertilidad.
Países cristianos
Honraban a la Virgen María, celebrando el día de la Inmaculada Concepción, el día 8 de diciembre.
Este es el día de la madre en algunos países, como Panamá.
Inglaterra
En el siglo XVI ó XVII se instauró el domingo como día para honrar a las madres. Las señoras permitían a sus sirvientas tomarse el día libre para visitar a sus madres.
Estados Unidos
Hubo dos mujeres que tuvieron que ver con la instauración del día de las madres como día de fiesta oficial en Estados Unidos. Una de ellas, Julia Ward Howe, escritora y autora del himno de la República, quería dedicar un día para las madres por la paz. En 1872 comenzó a celebrar encuentros para celebrar el día de las madres en Boston, Massachusetts, donde vivía.
Ann Jarvis es la otra mujer responsable de instaurar el día de la madre. Jarvis era un ama de casa que en 1905 creó la Asociación Internacional Día de la Madre, en conmemoración a la muerte de su propia madre Anne Marie Reeves Jarvis, que en la Guerra Civil de los Estados Unidos hizo esfuerzos por mejorar las condiciones sanitarias de ambos bandos.
En 1914, el Congreso de EE.UU. aprobó la fecha del segundo domingo de mayo como fiesta nacional y lo declaró el día de la madre.
Ann Jarvis quería que el día de la madre fuera un día de apreciación y conmemoración y cuando poco a poco lo vio convertido en un evento comercial, en el que comprar un regalo parecía algo obligado, quiso eliminar la celebración del calendario, pero no lo consiguió.

¿En qué fecha se celebra el día de la madre?

En países hispanos y en Estados Unidos se celebra en las siguientes fechas, dependiendo del país:
· En España y la República Dominicana el día de la madre se celebra el primer domingo de mayo
· En Colombia, Ecuador, Honduras, Perú, Puerto Rico, Uruguay, Venezuela y Estados Unidos se celebra el segundo domingo de mayo
  • En México, El Salvador y Guatemala, el 10 de mayo
  • En Paraguay es el 15 de mayo
  • En Bolivia el día de la madre es el 27 de mayo
  • En Nicaragua se celebra el 30 de mayo
  • En Argentina el día de la madre es el tercer domingo de octubre
  • En Panamá es el 8 de diciembre
  • En Costa Rica se celebra el 5 de agosto

miércoles, 10 de mayo de 2017

Orientación de como preparar composta






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Actividad con la Sra.Iglesia de Servicio de Extención Agrícola de Hatillo ofreciendo una orientación de como de preparar una composta a  los estudiantes de la Sra.Lamourt nuestra maestra de la clase de Agrícultura.

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jueves, 4 de mayo de 2017

¿Que es una leyenda?




Una leyenda es una narración de hechos naturales, sobrenaturales o una mezcla de ambos que se transmite de generación en generación en forma oral o escrita. Generalmente, el relato se sitúa de forma imprecisa entre el mito y el suceso verídico, lo que le confiere cierta singularidad.



¿CÓMO ES UNA LEYENDA?


Para poder detectar y construir una leyenda, te dejamos una enumeración de sus principales características.
1. La leyenda es una narración folclórica de tradición oral.
2. Intenta explicar y dar fundamento a hechos cotidianos, cuyo origen se remonta a un tiempo y lugar reales.
3. Sus personajes no son seres singulares, sino arquetípicos.
4. No habla sobre dioses, pero hay en ellas elementos sobrenaturales (sirenas, brujos, etc.).
5. Pueden clasificarse según su temática en tres grandes conjuntos. El primero es la etológica, que intenta dar explicación al origen de elementos de la naturaleza (montañas, ríos, lagos). Luego están las escatológicas que hablan sobre las creencias de la vida de ultratumba. Por últimos están las leyendas religiosas que cuentan historias sobre pactos con el demonio o sobre los hechos de justos y pecadores, etc.
6. También pueden clasificarse según el lugar de origen de las leyendas. En este sentido, las leyendas se dividen en rurales (las que se cuentan en zonas campesinas y que no funcionan en la ciudad), locales (propias de una provincia o zona específica) y por último se encuentran las leyendas urbanas, un tipo de folclore contemporáneo que circula en la ciudad.


Ejemplo de leyenda: La leyenda del Jinete sin Cabeza:
"El jinete sin cabeza"
Cuenta la leyenda, que en un pueblo alejado de todo civilización conocida, existió un jinete que acostumbraba a hacer su recorrido por las noches en un hermoso y gran caballo, la gente asombrada se preguntaba ¿Quién era aquel hombre? ¿Por qué cabalgaba cada noche?, no era algo usual que alguien saliera por las noches a hacer esos recorridos.
En una noche muy oscura y bajo una fuerte tormenta eléctrica, el jinete desapareció del lugar para no volver nunca más. Pasaron los años y la gente ya se había olvidado de aquel extraño jinete del que tanto se había hablado. 
Una noche, igual de obscura y tenebrosa, con enormes relampagos azotando el pequeño pueblo, se escuchó nuevamente la cabalgata de aquel caballo, su relinchar y  el ruido que producia al trotar sobre el suelo mojado despertó los recuerdos dormidos de todos aquellos que habían sido testigos de los sombríos paseos de aquel extraño jinete. Los recuerdos y la curiosidad llevaron a cada persona del pueblo a salir de sus camas y asomarse por la ventana, en donde  vieron un jinete cabalgar por las calles, fue cuando un relámpago cayó e iluminó al jinete, un jinete sin cabeza.




¿Qué es una fabula?

Una fábula es una composición literaria sencilla y breve, en verso o prosa, con personajes que generalmente son animales o seres inanimados. Estas composiciones literarias pueden ir enmarcadas en la didáctica, ya que buscan enseñar verdades morales que se resume en la moraleja, al final del relato.


Fábulas para niños

Las fábulas destacan por transmitir enseñanzas tan importantes que, aunque la mayoría de ellas fueron escritas hace siglos, actualmente siguen siendo imprescindibles en el día a día. Por ello, Mundo Primaria te presenta sus fábulas para niños, adaptaciones de las famosas fábulas de Esopo, las fábulas de Samaniego y las fábulas de La Fontaine, además de fábulas mexicanas, chinas y de otros lugares, reuniendo de esta manera conocimiento cultural de alrededor del mundo.

Las ranitas

Fábula Las ranitas

Adaptación de una antigua fábula de la India

Una mañana húmeda y soleada, un grupo de verdes y dicharacheras ranitas salió al bosque a dar un paseo. Eran cinco ranas muy amigas que, como siempre que se juntaban, iban croando y dando brincos para divertirse.
Desafortunadamente, lo que prometía ser una alegre jornada se truncó cuando dos de ellas calcularon mal el salto y cayeron a un tenebroso pozo.
Las otras tres corrieron a asomarse al borde del agujero y se miraron compungidas. La más grande exclamó horrorizada:
– ¡Oh, no! ¡Nuestras amigas están perdidas, no tienen salvación!
Negando con la cabeza empezó a gritarles:
– ¡Os habéis caído en un pozo muy hondo! ¡No podemos ayudaros y no intentéis salir porque es imposible!
Las dos ranitas miraron hacia arriba desesperadas ¡Querían salir de ese oscuro túnel vertical a toda costa! Empezaron a saltar sin descanso probando de todas las maneras posibles, pero la distancia hacia la luz era demasiado grande y ellas demasiado pequeñitas.
Otra de las ranas que las observaba desde la boca del pozo, en vez de animarlas, se unió a su compañera.
– ¡Es inútil que malgastéis vuestras fuerzas! ¡Este pozo es tremendamente profundo!
Las pobres ranitas continuaron intentándolo pero o no llegaban o se daban de bruces contra las resbaladizas paredes cubiertas de musgo.
La tercera rana también insistió:
– ¡Dejadlo ya! ¡Dejad de saltar! ¿No veis que vais a haceros daño?
Las tres hacían aspavientos con las patas y chillaban todo lo que podían para convencerlas de fracasarían en el intento.  Finalmente, una de las dos ranitas del pozo se convenció de que tenían razón y decidió rendirse; caminó unos pasos, se acurrucó en una esquina y se abandonó a su suerte.
La otra, en cambio, continuó luchando como una jabata por salir a la superficie. Estaba sudorosa y agotada pero ni de broma pensaba resignarse. En vez de eso, paró unos segundos para recobrar fuerzas y concentrarse en su objetivo. Cuando se sintió preparada, aspiró todo el aire que pudo, cogió carrerilla y se impulsó como si fuera una saltadora olímpica. El brinco fue tan rápido y exacto, que lo consiguió ¡Cayó sobre la hierba sana y salva!
Una vez afuera su corazón seguía latiendo a mil por hora y casi no podía respirar a causa del tremendo esfuerzo que había hecho.  Sus amigas le abanicaron con unas hojas y poco a poco se fue relajando hasta que recuperó la tranquilidad y se acostumbró a la cegadora luz del sol. Cuando vieron que ya podía hablar, una de las tres ranas le dijo:
– ¡Es increíble que hayas podido salir a pesar de que os gritábamos que era una misión imposible!
Ella, muy asombrada, le contestó:
– ¿Estabais diciendo que no lo intentáramos?
– ¡Sí, claro! Nos parecía  que jamás lo conseguiríais  y queríamos evitaros el mal trago de fracasar.
La rana suspiró.
– ¡Uf! ¡Pues menos mal que como estoy un poco sorda no entendía nada! Todo lo contrario ¡Os veía agitar las manos y pensaba que nos estabais animando a seguir!
Gracias a su sordera la rana no escuchó las palabras de desaliento y luchó sin descanso por salvar su vida hasta que lo logró.
La otra ranita, que sí se había rendido, vio el triunfo de su amiga y volvió a recuperar la confianza en sí misma. Se puso en pie, se armó de coraje y también aspiró una gran bocanada de aire; después, con una potencia más propia de un puma, se propulsó dando un salto espectacular que remató con una doble voltereta.
Sus cuatro amigas la vieron salir del pozo como un cohete y se quedaron pasmadas cuando cayó a sus pies. La reanimaron igual que a su compañera y cuando se encontró bien,  se marcharon a sus casas croando y dando brincos como siempre.
Moraleja: Muchas veces dejamos de creer en nosotros mismos, dejamos de creer que somos capaces de hacer cosas, porque los demás nos desaniman. Confía siempre en tus capacidades y lucha por tus sueños. Casi nada es imposible si pones en ello todo tu corazón.

El cuervo y la jarra

Fábula El cuervo y la jarra

Adaptación de la antigua fábula de Esopo

Un caluroso día de verano, de esos en los que el sol abrasa y obliga a todos los animales a resguardarse a la sombra de sus cuevas y madrigueras, un cuervo negro como el carbón empezó a sentirse muy cansado y muerto de sed.
El bochorno  era tan grande que todo el campo estaba reseco y no había agua por ninguna parte. El cuervo, al igual que otras aves, se vio obligado a alejarse del bosque y sobrevolar las  zonas colindantes con la esperanza  de encontrar un lugar donde beber. En esas circunstancias era difícil surcar el cielo pero tenía que intentarlo porque ya no lo resistía más y estaba a punto de desfallecer.
No vio ningún lago, no vio ningún río, no vio ningún charco… ¡La situación era desesperante! Cuando su lengua ya estaba áspera como un trapo y le faltaban fuerzas para mover las alas, divisó una jarra de barro en el suelo.
– ¡Oh, una jarra tirada sobre la hierba! ¡Con suerte tendrá un poco de agua fresca!
Bajó en picado, se posó junto a ella, asomó el ojo por el agujero como si fuera un catalejo, y pudo distinguir el preciado líquido transparente al fondo.
Su cara se iluminó de alegría.
– ¡Agua, es agua! ¡Estoy salvado!
Introdujo el pico por el orificio para poder sorberla pero el pobre se llevó un chasco de campeonato ¡Era demasiado corto para alcanzarla!
– ¡Vaya, qué contrariedad! ¡Eso me pasa por haber nacido cuervo en vez de garza!
Muy nervioso se puso a dar vueltas alrededor de la jarra. Caviló unos segundos y se le ocurrió que lo mejor sería volcarla y tratar de beber el agua antes de que la tierra la absorbiera.
Sin perder tiempo empezó a empujar el recipiente con la cabeza como si fuera un toro embistiendo a otro toro, pero el objeto ni se movió y de nuevo se dio de bruces con la realidad: no era más que un cuervo delgado y frágil, sin la fuerza suficiente para tumbar un objeto tan pesado.
– ¡Maldita sea! ¡Tengo que encontrar la manera de llegar hasta el agua o moriré de sed!
Sacudió la pata derecha e intentó introducirla por la boca de la jarra para ver si al menos podía empaparla un poco y lamer unas gotas. El fracaso fue rotundo porque sus dedos curvados eran demasiado grandes.
– ¡Qué mala suerte! ¡Ni cortándome las uñas podría meter la pata en esta estúpida vasija!
A esas alturas ya estaba muy alterado. La angustia que sentía no le dejaba pensar con claridad, pero de ninguna manera se desanimó. En vez de tirar la toalla, decidió parar un momento y sentarse a reflexionar hasta hallar la respuesta a la gran pregunta:
– ¿Qué puedo hacer para beber el agua hay dentro de la jarra? ¿Qué puedo hacer?
Trató de relajarse, respiró hondo, se concentró, y de repente su mente se aclaró ¡Había encontrado la solución al problema!
– ¡Sí, ya lo tengo! ¡¿Cómo no me di cuenta antes?!
Empezó a recoger piedras pequeñas y a meterlas una a una en la jarra. Diez, veinte, cincuenta, sesenta, noventa… Con paciencia y tesón trabajó bajo el tórrido sol hasta que casi cien piedras fueron ocupando el espacio interior y cubriendo el fondo. Con ello consiguió lo que tanto anhelaba: que el agua subiera y subiera hasta llegar al agujero.
– ¡Viva, viva, al fin lo conseguí! ¡Agüita fresca para beber!
Para el cuervo  fue un momento de felicidad absoluta. Gracias a su capacidad de razonamiento y a su perseverancia consiguió superar las dificultades y logró beber para salvar su vida.
Moraleja: Al igual que el cuervo de esta pequeña fábula, si alguna vez te encuentras con un problema lo mejor que puedes hacer es tranquilizarte y tratar de buscar de forma serena  una solución.
La calma, la lógica y el ingenio son fundamentales  para salir de situaciones difíciles y aunque te parezca mentira,  cuando uno está en aprietos, a menudo  surgen las ideas más ocurrentes.

20 libros que leer antes de los 13 años




20 libros que leer antes de cumplir los 13 años




Todos conocemos la importancia de la lectura desde temprana edad, sin embargo a veces parece difícil conseguir que los niños encuentren buenas historias que les inviten a seguir leyendo y les enganchen a la lectura.
En Mundo Primaria hemos elaborado esta lista con los 20 libros recomendados para niños para ser leídos antes de los 13 años. Relatos sobre la amistad, las emociones, la fantasía, relatos cortos de terror o simplemente historias divertidas que les acompañarán desde sus primeros años y que releerán y recordarán incluso de adultos. ¿Cuál es tu favorito?

1. Adivina cuánto te quiero (de 0 a 4 años de) Sam McBratney

¿Cómo se puede medir un sentimiento como el amor? La pequeña liebre intentará hacérselo saber a su mamá ¿serán sus brazos suficientes? Un cuento ilustrado perfecto para antes de irse a dormir.

2. La pequeña oruga glotona (de 0 a 4 años) de Eric Carle

En este cuento se relata la aventura de una pequeña oruga muy comilona y sus pasos a lo largo de la semana hasta convertirse en una preciosa mariposa. Una buena forma de iniciar a los más pequeños en las pequeñas grandes historias.

3. Elmer (de 0 a 4 años) de David McKee

Elmer es un elefante diferente ¡Es un elefante de mil colores! Y por muy impresionante que parezca a Elmer no le gusta mucho ser distinto, por lo que un día se escapa de la manada para buscar la forma de ser gris como el resto de los elefantes. Un cuento con el que adquirir los valores de la tolerancia y el respeto.

4. Sapo y Sepo, inseparables (de 4 a 6 años) Arnold Lobel

Sapo y Sepo son los mejores amigos. Van de paseo, cuidan del jardín, comparten las galletas y viven emocionantes aventuras. Una buena historia para empezar a leer.

5. Yo mataré monstruos por ti (a partir de 5 años) de Santi Balmes

Martina tiene miedo por las noches porque cree que bajo el suelo de su cuarto habitan monstruos que caminan cabeza abajo. Una bonita historia para aprender a combatir los miedos de los más pequeños.
6. El príncipe Ceniciento (a partir de 5 años) de Babette Colle
Una nueva versión de la historia tradicional escrita por Charles Perrault, que esta vez llamará la atención de los más pequeños por la inversión de los estereotipos de género ¿Un príncipe que limpia? Otra opción similar es el Ceniciento de Yanitzia Canetti.

7. Caperucita Roja, Verde, Amarilla, Azul y Blanca (a partir de 6 años) de Bruno Munari y Enrica Agostinelli

Otra versión de un cuento clásico. En este caso las Caperucitas son niñas muy listas que, gracias a sus amigos, consiguen dejar al lobo hambriento.

8. Donde viven los monstruos (a partir de 6 años) de Maurice Sendak

Max es un niño travieso cuya mayor fantasía es ser un monstruo terrorífico. Una noche acaba castigado en su habitación, donde, de pronto, todo se transforma y Max aparece en una selva.

9. Abuelita Opalina (a partir de 7 años) de María Puncel

A todos los niños les mandan deberes, y esta vez, a Isa le han mandado escribir una redacción sobre su abuela. Como Isa no tiene abuela escribe sobre una abuela imaginaria, que reúne todas las cualidades de las abuelas de sus amigos.

10. El pampinoplas (a partir de 7 años) de Consuelo Armijo

Poliche es un niño que va a visitar a su abuelo al pueblo. Lo que pensaba que iban a ser unos días aburridos se convierte en una aventura para desenmascarar al Pampinoplas, un persona que ha atemorizado a todo el pueblo.

11. Un duende a rayas (a partir de 7 años) de María Puncel

Hay duendes verdes, duendes rojos… pero el nuestro es un duende a  rayas, que cuando se hace mayor decide emprender un viaje para descubrirse a sí mismo y decidir de qué color quiere ser.

12. Memorias de una gallina (a partir de 8 años) de Concha López Narváez

Carolina es una gallina especial. Es muy inconformista y desde pequeña pone en duda las normas y reflexiona con humor sobre los verdaderos valores de la vida. Un libro con el que aprender sobre la convivencia y la igualdad.

13. Fray Perico y su borrico (a partir de 8 años) de Juan Muñoz Martín

En el s. XIX, veinte frailes viven tranquilos en un convento de Salamanca… hasta que llegan Fray Perico y su borrico para revolucionarlo. Una historia llena de situaciones divertidas.

14. El Principito (a partir de 10 años) de Antoine de Saint-Exupéry

El clásico que no puede faltar en una biblioteca infantil. Todo empieza cuando un piloto, perdido en el Sáhara, se encuentra con un pequeño príncipe de otro planeta. El resto de esta maravillosa historia merece la pena leerlo.

15. Cuentos en verso para niños perversos (a partir de 10 años) Roald Dahl

De nuevo, una obra que reinventa seis cuentos clásicos. Esta vez los llena de acción y humor ¿y si Blancanieves ya no es una inocente princesa? ¡Nos encantan estos cuentos!

16. Manolito Gafotas (a partir de 10 años) de Elvira Lindo

El primer libro de la serie nos presenta al niño más famoso del barrio de Carabanchel Alto y su peculiar familia. Actual y divertido, enganchará a los niños de principio a fin.

17. Harry Potter y la piedra filosofal (a partir de 10 años) de J. K. Rowling

El primero de los libros de esta saga fantástica. En él, el joven mago nos introduce en el mundo de la escuela de magia Hogwarts y las aventuras que en él se esconden. Con el resto de la saga, Harry Potter y sus compañeros crecerán con sus lectores, no podrán quitárselo de las manos. ¿Magia?

18. Matilda (a partir de 12 años) Roald Dahl

Matilda es la niña más especial que conocerás jamás. Sin haber cumplido los cinco años ya ha leído un montón de libros, aunque sus padres la consideran una inútil. Cuando entra en su nuevo colegio y conoce a la señorita Honey descubre que tiene una habilidad maravillosa. Una historia que recordarán para siempre.

19. Momo (a partir de 12 años) de Michael Ende

Momo es una niña con la habilidad de saber escuchar a los demás y ayudarles a humanizar sus vidas, aunque todo se pone en peligro cuando los hombres grises amenazan con robarles el tiempo.

20. Charlie y la fábrica de chocolate (a partir de 12 años) de Roald Dahl

Charlie ha conseguido un billete dorado, lo que significa que será uno de los afortunados que visitará la fábrica de chocolate del extravagante Willy Wonka. Con Charlie aprenderemos valores como la generosidad y la responsabilidad mientras nos divertimos.

  ¿QUÉ ES Y CÓMO HACER UN OPÚSCULO (BROCHURE)?  ESTUDIANTES: En la gran mayoría de las clases les solicitan realizar un opúsculo (brochure),...